Aunque todos soñamos con trabajar en un lugar amplio, cómodo y con mucho espacio, la realidad es que la mayoría de las veces debemos conformarnos con oficinas pequeñas en las que apenas caben nuestros insumos de trabajo y una que otra foto. ¿Cómo puedo entonces optimizar el espacio en mi oficina sin sacrificar mi comodidad? Minialmacenes Oriente te ofrece algunas soluciones para lograrlo.
Lo primero que debemos tener en cuenta es que optimizar el espacio de la oficina no es solo procurar nuestra comodidad; significa también aumentar nuestra productividad y alcanzar la máxima funcionalidad de nuestro espacio de trabajo.
Un lugar para cada cosa y cada cosa en su lugar
Una de las cosas que menos ayudan a la productividad laboral es la desconcentración ocasionada por el desorden de la oficina o del espacio del trabajo. Para contrarrestar estos efectos negativos es necesario almacenar de forma inteligente documentos, archivos, insumos y herramientas de trabajo. Sin embargo, cuando se cuenta con un lugar pequeño, esta premisa no parece poder cumplirse a cabalidad, por lo que se debe entonces pensar en soluciones de almacenaje inteligentes como el llamado mobiliario flexible.
Mobiliario flotante: repisas y estantes para mejorar la funcionalidad
Las paredes son sin lugar a duda uno de los mejores espacios de la oficina que pueden ser aprovechados con la instalación de repisas y estantes flotantes. Además, como el espacio reducido no es excusa para no decorar nuestro lugar de trabajo, las repisas pueden sostener perfectamente aquellas cosas que imprimen un toque personalizado a la oficina y que nos hacen sentir como en casa. Estos elementos pueden ponerse, por ejemplo, encima del escritorio, de manera que se pueda aprovechar mejor el espacio.
Por otra parte, pensar en adquirir escritorios con varios compartimentos o cajones pensados para guardar es otra de las soluciones más prácticas cuando se trabaja en lugares pequeños.